Cómo le puede favorecer el uso de servidores virtuales
Para entender qué son los servidores virtuales y en qué se diferencian de los servidores físicos, es necesario entender antes qué es un servidor.
De manera sencilla, y desde el punto de vista de componentes, este equipo es similar a un computador, es decir, cuenta con RAM, CPU, disco duro y capacidad de procesamiento, y su conexión o comunicación se lleva a cabo a través de una red, 24 horas al día, los 7 días de la semana, lo que representa disponibilidad total de la máquina para la organización.
“En esencia, un servidor efectúa la administración centralizada de la información requerida o usada por una empresa, característica que evidencia su importancia para los procesos de cualquier empresa”, explica Robert Ramírez, líder de producto de Cloud y alianzas de Claro.
Con base en esto, un servidor físico requiere de energía, aire acondicionado, un espacio adecuado y personal dedicado al control y mantenimiento, además de sistemas de monitoreo y seguridad, todo esto requiere de un gran esfuerzo por parte de proveedores y organizaciones, con un importante impacto en materia de tiempo y dinero.
Por otro lado, los servidores virtuales son servicios en la nube, es decir, no están sujetos a un equipo físico instalado en las compañías. En este caso, son los proveedores quienes se encargan de la infraestructura relacionada, externa a las organizaciones que contratan los servicios, aunque disponible todo el tiempo y con las características de almacenamiento, capacidad y procesamiento requeridas por las empresas.
“El acceso de las compañías a los servidores virtuales es muy fácil y, generalmente, se efectúa mediante una ruta electrónica o http, un login y un password. Es así de simple”, señala Ramírez.
VENTAJAS QUE GENERAN AHORROS
Aunque en Colombia muchas compañías siguen optando por los servidores físicos bajo la creencia de tener más control sobre los mismos y los consideran un componente visible vital para el negocio, lo cierto es que los servidores virtuales ofrecen grandes ventajas en cuanto a reducción de gastos y beneficios de oportunidad.
Por ejemplo, la adopción de equipos físicos conlleva una serie de costos evidentes y ocultos, como la escalabilidad y su adecuación al crecimiento de las organizaciones, ya que los servidores físicos cuentan con una capacidad específica de usuarios. Cuando este número crece, la empresa debe afrontar sobrecostos de adecuación de esta infraestructura.
Otros gastos incluyen mantenimiento preventivo, monitoreo de las baterías, seguimiento detallado del ecosistema de máquinas y optimización del consumo de energía.
Los servidores virtuales, en cambio, y por su característica de almacenamiento y funcionamiento minimizan estas inversiones porque, primero, son escalables y su adaptación al crecimiento de las compañías es dinámico.
También, reducen los trámites de compras, presupuestos, envíos e instalación, que representan tiempo y dinero. Los proveedores de servidores virtuales permiten, en un lapso de tiempo de entre 15 minutos y dos horas, poner un servidor a disposición de los empresarios.
Además, el servicio ofrecido es por uso y no por máquina, una característica que les permite a las organizaciones ajustarlos a sus requerimientos e, incluso, dar por terminado el contrato de arrendamiento sin el riesgo del inventario inútil almacenado y a pérdida.
Finalmente, los servidores virtuales cuentan con altos niveles de seguridad que garantizan la salvaguardia de la información empresarial.Es importante considerar servidores establecidos en Colombia, sometidos a la protección de datos nacionales y sin el riesgo de ajustarse a legislaciones propias de protección y uso de datos, y acceso a los mismos, de países como Estados Unidos.
Fuente: http://www.portafolio.co/
